Opel GT por Virgilio Conrero, vuelta de tuerca a la italiana



El Opel GT es una joya. Su carrocería tipo "botella de Coca-Cola" y su perfil aerodinámico, no muy habitual en las calles por aquellos años, convirtieron rápidamente al deportivo de Rüsselsheim en un icono. Da igual que literalmente no tuviera maletero o que bajo su carrocería se encontrara el chasis de un popular Kadett B, el coche enamoró por su diseño, ligereza y conducción.

Del gran turismo de Opel se dijo todo hace tres años, cuando el modelo celebró su cincuenta aniversario y la marca mandó una nota a toda la prensa. El GT nació como proyecto extraoficial del Departamento de Diseño, materializándose en el poco refinado prototipo Experimental GT, gustando la idea a público y marca. Tras sólo dos años de desarrollo el Opel GT saldría a la venta en 1968. Estilísticamente bebía del Corvette C3, Ferrari e incluso Aston Martin. Su trasera de "estilo Kammback" a modo de lágrima cortada reduce las turbulencias que pueda generar, haciéndolo más eficiente. 

Mecánicamente heredaba el motor de su primo el Kadett. Tuvo una versión básica de solo sesenta caballos y la más popular de noventa. Siempre unidos a una caja de cambios de cuatro marchas. Los frenos eran de disco y tambor detrás, estos últimos suficientes para frenar el poco peso del que disfrutaba el coche. 


La base del GT se descubrió enseguida muy acorde para disfrutar en competición. El pequeño deportivo de Opel destacó en circuitos y sobre todo en rallys. En estos últimos, sería donde el preparador italiano especialista en Alfa Romeo, Virgilio Conrero, sacaría lo mejor del modelo. Su motor en versión 1.9 tuvo fama de estar infrapotenciado y probablemente han sido las preparaciones de los italianos los que más jugo le han sacado. 

A principios de los 70, Autotecnica Conrero empezó a modificar con tímidos cambios el GT. Con apenas una decenas de caballos añadidos el coche ya fue cuarto en su primera carrera. Su mayor problema era su caja de cambios, de sólo cuatro relaciones, siendo las dos primeras demasiado cortas. También se modificó su ancho de vías, siendo proporcionalmente ensanchados sus guardabarros. 

En ese mismo año ya la apuesta con el Opel GT se vuelve seria. El motor 1.9 ya se mueve entorno a los 170 caballos y las modificaciones en suspensiones y frenos hacen que consiga su primera victoria de la mano del preparador italiano. En el Gran Premio de Mugello consiguen ganar, gracias a su ya respetable potencia y al tamaño de su deposito de combustible, que les permite hacer menos paradas. Vencen a su rival directo de categoría, el 914-6, y varios 911. Ya se empieza a conocer como el mata-Porsche.


En 1971 llegaría la victoria con más solera de Opel y Conrero. El GT se llevaría a casa la Targa Florio en la categoría GT de dos litros tras un final agónico. Por presupuesto, sólo podían presentar tres Opel a la competición, frente a todo el imperio Porsche que implicaba a siete unidades. Cinco Porsche 911 S y dos 914-6. 

Para comprometer aún más las opciones de Opel, dos de las unidades abandonaron por problemas técnicos y el -a la postre- ganador sufrió en los últimos compases de la carrera un pinchazo lento. De la mano de Salvatore Calascibeta se pudieron proclamar ganadores en su clase y lograr un meritorio noveno en la general. 

Con la vista puesta en las posteriores competiciones, Virgilio Conrero consiguieron por fin montar la deseada caja de cambios de cinco relaciones. Sin embargo, esto no se tradujo en cambios sustanciales acompañados de mejores resultados. 

El Opel GT de todas formas, siguió consiguiendo prestigio en rallys y circuitos de toda Europa. El Grupo 4 puede dar buena cuenta de ello.


Fuentes: classicmotorsports | drivetribe


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Comentarios

  1. Historia muy interesante el de este deportivo de competición, y el final de la carrera de la Targa Florio tuvo que provocar algún infartito que otro dentro de Opel. Estéticamente, a pesar de que como comentas bebe de los estilos italiano y británico, lo mire por donde lo mire lo veo muy japonés (me recuerda mucho al 240 Z) En cuanto a las versiones de calle yo creo que el 90 CV debía rodar con bastante soltura, y no sé el de 60... Pero vamos, no me importaría tener uno.

    Saludos ;)

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    1. La versión de 60 CV duró muy poco en el mercado, estuvo a la venta como un año o así y creo que en mercados muy limitados. De todas formas la versión de 90 siempre fue la más vendida. El GT tiene pinta de ser un coche para disfrutar con su chasis, más que para potencias desmedidas.

      Saludos!

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  2. Conocía al Baby Vette, pero no sabía que tuviera versiones tan aguerridas, ni mucho menos imaginé que serían capaces de plantar bandera a Porsche.
    Debió ser un modelo interesante para correr.

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    1. Todo hace indicar que debido a su receta podía ser un buen coche para correr, ligero, buen reparto de pesos... Con poco ya fue competitivo. Lo raro hubiera sido lo contrario.

      Saludos!

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  3. Larga tradición de los Opel en rallyes con los Manta y los Ascona 400, el ultimo coche dos ruedas motrices en ganar el mundial y el campeonato de españa de Mia Bardolet a los mandos de un Astra, en circuitos también recuerdo el Calibra V6 DTM ganado por Reuter, pero no conocía la versión rally del GT preparado por Conrero.

    Saludos!

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    1. Como dices, Opel tiene un gran bagaje en competición. Creo que desde hace años están reducidos a categorías inferiores, ahora creo que preparan un Corsa para rally pero eléctrico. Ojalá verlos de nuevo en lo alto, con esos bonitos colores oficiales, gris, amarillo y blanco.

      Saludos!

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