La tortuga V8


No te equivoques a pesar del título. Seguimos siendo un blog de coches. Tampoco hablamos de maltrato animal, nadie ha puesto una pobre tortuguita encima de un motor V8. Bueno, esto último no en el sentido literal. Más bien han elegido como logo de una marca de coches deportiva una tortuga, sí, como lo lees. Acostumbrados a toros, caballos alzados sobre sus patas traseras, caballos con alas, leones, jaguares...Pues esta vez le toca tener protagonismo a una inofensiva y lenta tortuga.

Y es que por lo general los logos están hechos para reflejar el carácter de una marca y esta vez no parece ser así.



En 1964 se dió comienzo a la producción del Gordon Keeble GT, uno de esos desconocidos coches que tanto nos gustan por aquí. Anteriormente, los responsables de la marca John Gordon - responsable y dueño de la marca de coches Peerless- y Jim Keeble -ingeniero y piloto de carreras- habían trabajado para un piloto norteamericano, que quería que le introdujera un motor de Corvette a su coche de carreras Peerless. 

Tanto Gordon como Keeble consideraron que era mejor empezar de nuevo con otro proyecto. Antes de seguir, aclarar que los Peerless fueron coches que pretendían rivalizar con los Aston Martin (1957) aunque a un precio bastante inferior. El proyecto Peerless fracasó como posteriormente lo haría los Gordon Keeble.


John Gordon abandonaría Peerless y hablaría ese mismo año con Jim Keeble. La idea sería la misma que con los Peerless, aunque introduciéndoles un motor de ocho cilindros en uve americano. El chasis era similar a los vehículos de la difunta marca y el tipo de coche también: pretendía un gran turismo de lujo y cuatro plazas.

El coche sería diseñado por Giugiaro y construido por Bertone, el primer prototipo se construyó en Italia en solo cuatro meses y fue presentado en el Salón de Ginebra de 1960. Las críticas fueron favorables y John Gordon llevo el coche a Estados Unidos, donde se lo presentó a los responsables de General Motors, que quedaron impresionados con su conducción, y les administro motores y cajas de cambio así como a toda la red de distribución de GM en el país americano.


Los Gordon Keeble tenían un precio de venta muy reducido lo que creó rápidamente problemas de liquidez. Además la huelga de uno de los proveedores cuando solo dieciséis GTs habían sido producidos fue la puntilla para que la empresa se declara en bancarrota. Posteriormente, tanto Gordon como Keeble renunciarían a sus puesto en la empresa y ya no formarían parte de ella. Así en Mayo de 1965, se consigue reanudar la compañía pero con otras personas al frente.

Cien coches se consiguieron producir de los que vive en la actualidad el 97% de ellos. En 1970 se forma el Club de propietarios Gordon-Keeble, que suministra piezas y consigue que estos ejemplares puedan continuar en la carretera aun a día de hoy. 

La vida de la marca se asemejaría con la tortuga de su logo. Una tortuga que nace en una playa, arrastrándose por las ondulaciones de la arena, con algunas dificultades para llegar al mar aunque consiguiendo llegar. Todavía le queda esquivar olas y sumergirse, para finalmente poder reflotar en un mar lleno de depredadores y convertirse en una codiciada tortuga de cincuenta años de edad.






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Comentarios

  1. ¡Increíble! Y yo que pensaba que el logo más original y bonito era el grifo coronado de Saab, jejeje. Por cierto, me ha llamado muchísimo la atención el diseño del coche, con una silueta muy a la italiana mezclada perfectamente con rasgos ingleses; se nota que tenían a Aston Martin en el punto de mira.

    ¡Un saludo! y como siempre, genial post ;)

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  2. Alvaro, tienes razón, su diseño es uno de sus puntos fuertes. Claramente se ve que es un diseño británico pero si te fijas los toques italianos están presentes y debajo nada más y nada menos que un motor V8 americano.

    Saludos y gracias!

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  3. Alucinante!, hay que ser muy osado para utilizar a una lenta tortuga como logo en el mundo del automovilismo, pero todos sabemos como acaba la fabula de la liebre y la tortuga, jeje.

    El diseño del Gordon Keeble GT me recuerda mucho al Flaminia GT.

    Interesante coche y mas quedando solo 97 de unidades, imagino sera bastante cotizado.
    Saludos.

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. Pues Xavi, me he puesto a curiosear y encontré uno a la venta en 2012 por 45.000 euros.

    Saludos y gracias!

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  6. Tan bello como desconocido, y con aire de carreras gracias a su V8 y sus líneas.
    Gracias por descubrirnos este auto Mauro.
    Abrazo!

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  7. Que pena que no exista versión de competición Juanh, seguro lo querrías tener en miniatura.

    Saludos!

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